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Mostrando entradas de diciembre, 2017

DER ADVENTSKALENDER ( EL CALENDARIO DE ADVIENTO), artículo publicado el 3 de diciembre de 2017 en Diario de Pontevedra

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  Este lunes pasado, cuando hacía la gran compra anual de calendarios de Adviento para repartir entre mis más pequeños y los no tanto (regalo muchos, ¡me encanta!), sentí “rosmar” a una señora qué al verme tan cargada, le dice a su amiga en esa tan típica actuación española de, “lo digo para que se entere, pero como si no se lo dijera… “¡hala, otra americanada!”. Pues, ¡no, señora!     Quizá al igual que esta mujer muchos pensarán que este mes de noviembre, al que el refranero gallego se refiere como “¡ Bendito mes que empeza con Santos e acaba con San Andrés !”, es en el cual se hacen visibles muchas “novedades consumistas”, pues no le quito parte de razón, aunque en este caso, no la tienen. “Halloween”, “Black Friday”, “Cyber Monday”, los descuentos en las grandes multinacionales textiles y de complementos con sus “Middle Season” (mitad de temporada)…, es cierto que nos están invadiendo; y de la misma manera que, cualquier día me veo inmersa en una gran campaña de

¡VAMOS A POR TÍ, MACHOTE!, artículo publicado el 26 de noviembre de 2017 en Diario de Pontevedra

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¡Se acabó!, ¡no te lo vamos a consentir más!, ¡vamos a por ti, “machote”!, que presumiendo de tal, tienes más de mazo que de hombre. Porque ser hombre es otra cosa, y “machote”, tiene más que ver con tu estilo, con lo que eres, con el mazo y con los golpes. A las mujeres se las respeta, se las mima, se las quiere, o ¿acaso olvidas de dónde vienes tú? Pues de una mujer, desgraciado, delincuente, “machote”. Son cientos de miles las mujeres que, aún hoy, sufren violencia sólo por el hecho de la existencia de individuos como tú que os consideráis superiores, e intentáis demostrar vuestra frustración, haciendo uso de la violencia física, psicológica, sexual y de control. Me dirijo a todos estos cobardes, y en especial a ti que incluso me puedes estar leyendo, y te digo para empezar que, no eres más que un matón, un acomplejado que das asco, un espantajo de la peor ralea. Y para continuar te mando al mismísimo Infierno, sí, ¡vete al Infierno!, si es que te dejan entrar. P